Se celebran a finales del mes de agosto en el barrio del Raval y son fruto de la herencia histórica de los franciscanos. Durante quince días, la Cofradía de la Corte de María, y su Clavaría y Mayoralía, organizan los actos religiosos, lúdicos y culturales, entre los cuales destacan la cabalgata, “la Baixà” y el posterior besamanos, la procesión y la “Merenguina”, una dulce batalla en la que más de 15.000 merengues se convierten en chistosos proyectiles. Esta singular y divertida celebración ha sido declarada fiesta de Interés Turístico Local.