¡FELIZ DÍA MUNDIAL DEL TURISMO! (Inteligente y Sostenible)
Habrás oído mil veces que nadie es profeta en su tierra. Ni las personas, ni los propios lugares. Cuesta valorar lo próximo, lo nuestro. A pesar de los muchos encantos, de los incontables secretos por descubrir que tenemos al lado de casa. En estos tiempos globales, prima viajar hacia lo exótico, a lo lejano, por el mero hecho de su difícil accesibilidad: cuanto más inaccesible, más exclusivo y por tanto más ‘cool’. O más ‘instagrameable’, en definitiva.
Parece que un río de Eslovenia debe tener el agua más transparente que el Túria. Que un castillo de los Cárpatos debe esconder mejores historias y estar mejor conservado que uno de Benissanó. Que una cataplana en el Algarve sabrá mejor que una paella valenciana con leña de naranjo. O que una ruta con camellos en el desierto de Lanzarote despertará mejores sensaciones que un paseo a caballo al atardecer por la Sierra Calderona. Pero… oh, wait! ¿Seguro que realmente esto es así?
Llega el Día Mundial del Turismo, y cada vez es más evidente el cambio de conciencia a nivel internacional. El turismo sostenible, el turismo inteligente, es el que tenemos cerca. El que apenas deja huella de carbono porque no requiere largos viajes de avión. El que apoya a tus vecinos y fomenta el desarrollo local consolidando trabajos de calidad. El que sabe apreciar las variadas excelencias gastronómicas kilómetro 0 que ofrece nuestra terreta. El que educa y divierte a nuestros hijos concienciándoles sobre su propio entorno natural.
Este artículo no pretende cortarte las alas: a nosotros también nos encanta conocer mundo. Pero sí nos gustaría hacer vibrar tu conciencia, como una de esas alarmas-recordatorio que te pones en el móvil: “Oye, ¿qué pasa con todas esas maravillas que tienes tan a mano y todavía no conoces?”. Pues eso, que ya va siendo hora. Con la excusa del Día Mundial del Turismo, te vamos a mostrar todos los tipos de turista que puedes llegar a ser a menos de una hora de València. En Camp de Túria. Porque Camp de Túria es camp d’essències, d’aventures i de sabors.
Camp d’essències: Turismo cultural y de patrimonio histórico
Si eres de los que antes de salir de viaje se empapa de todas las hazañas históricas de los lugares que piensa visitar. Si cuando descubres un monumento te interesas en saber quién y cuándo lo construyó. En Camp de Túria lo vas a gozar. Porque pocas comarcas guardan vestigios de tantas civilizaciones en tan pocos kilómetros. Poblados íberos con un lenguaje todavía no descifrado. Suntuosas Termas Romanas con más de 2000 años de antigüedad (lo que hoy llamamos un SPA de lujo). Castillos que custodiaron a poderosos reyes europeos. Baños árabes como legado de una cultura que nos marcó. Y cientos de tesoros más, cada uno con su esencia y sus pequeñas anécdotas, con sus grandes historias por descubrir. Además, aquí te las narran como en ningún otro sitio: visitas teatralizadas, conciertos en iglesias del siglo XIII, cuentos bajo la magia de las estrellas, guías expertos que lo viven y contagian su pasión… Te hechizarán, por ejemplo, con la verdadera historia de ‘la Calderona’, una mítica actriz del siglo XVII que da nombre a toda una Sierra. Si eres ese tipo de viajero que disfruta descubriendo secretos y leyendas de sus antepasados para luego contarlo en el almuerzo del sábado, aquí tienes varias propuestas. No te defraudarán:
Camp d’aventures: Turismo deportivo y de naturaleza
Cuando llega el finde, quieres sentir la adrenalina. Porque tú no eres de los de sofá y mando a distancia. Te va el contacto directo con la montaña y no te asusta salpicar tu cara con el agua fresca del río. Pues en Camp de Túria vas a poder vivir decenas de aventuras. Desde trepar por una pared vertical con paisajes increíbles hasta descender con ráfting o káyak el río más querido de los valencianos: el Turia. (OJO SPOILER: Sus aguas son tan transparentes o más que las del Danubio, aunque todavía no le hayan compuesto un vals). Y una vez lo navegues, lo puedes recorrer a caballo. Porque hay infinitas rutas ecuestres en esta comarca que te deslumbrarán (alguna literalmente, pues cabalgarás bajo la luna llena). Barranquismo, rápeles, marcha nórdica, tiro con arco, paintball… y hasta ‘birdwatching’, si eres fan de las aves. Más contacto directo con la Madre Naturaleza, imposible. Echa un ojo a todo lo que puedes vivir como amante del deporte de aventura y apasionado de la naturaleza:
Camp de sabors: Turismo gastronómico
Vale, eres lo que ahora llaman un ‘foodie’. O ‘experto gourmet’. Que te gusta comer bien y probar cosas nuevas, vamos. Como a nosotros. Entonces, si te digo que la mejor paella valenciana (a leña) se cocina en Camp de Túria probablemente no me creerás. Bueno, pues pregúntale al Rey (al Emérito) que él si la ha probado. Además, aquí te enseñan los secretos para que te salga perfecta en una Masterclass. Ahí lo dejo: ya no tienes excusa para esos domingos de verano con los amigotes.
Si buscas algo todavía más único y sofisticado, puedes disfrutar de un viaje por la Ruta de la Seda sin salir de la comarca. Porque también tenemos chefs que conocen los platos tradicionales que se servían hace siglos desde Valencia hasta el lejano oriente y que te los preparan con sus especias ancestrales y maridados con los mejores vinos valencianos. Pero puede que busques algo más sencillo y natural para tus peques: una cata de mieles aprendiendo cómo es la vida de las abejas, y su importancia en la naturaleza. O cómo se cultiva la espirulina, el superalimento de moda. Todo eso lo puedes vivir aquí:
Lo dicho: queremos que viajes mucho, que recorras el planeta. Pero no olvides que viajar cerca también es viajar. Que Camp de Túria también forma parte del planeta. Y que conocerlo es mucho más sostenible y respetuoso con el entorno (y agradable para el bolsillo). En familia, con tu pareja, con tu grupo de amigos. O a tu aire. Ya sea que busques aventuras de montaña, rutas culturales, turismo adaptado para personas con movilidad reducida o experiencias gastronómicas de esas que se guardan en un rincón del paladar. Camp de Túria es mucho Camp de Túria. Es, de hecho, más de lo que crees. Caminos, silencio, bosques y saberes. Mochila, diversión, historias y sabores. Si quieres estar de paso, viaja lejos. Si quieres conocer -y conocerte- explora lo que tienes cerca. Porque al lado de casa se abre otro pequeño mundo donde despertarán de nuevo tus mejores sensaciones. Feliz Día Mundial del Turismo.
